El trabajo es aquello que nos ha acompañado desde el inicio de las civilizaciones.
En sus inicios, el trabajo principal que podía tener una mujer consistía en casarse y tener hijos o, en el peor de los casos, ser sirvienta.
Por fortuna, todo esto ha cambiado con el paso de los años y ahora las mujeres se desempeñan en el ámbito laboral de su preferencia.
Para algunas madres, el trabajo puede generar culpa por tener que dejar a sus hijos todos los días. Pero lo cierto es que esto no tiene que ser así, pues los hijos de las madres trabajadoras son más exitosos en el futuro.
Las mujeres trabajadoras y su historia:
No fue sino hasta 1800 que en el sur de Australia las cosas comenzaron a cambiar y las mujeres pudieron comenzar a postularse incluso a cargos políticos, como parte del parlamento, estudiar medicina o ser científicos.
Sin embargo, con todos los eventos que ocurrían en la Segunda Guerra Mundial, las mujeres tuvieron que comenzar a suplir sus puestos en los trabajos hasta que estos volvieron y ellas fueron forzadas a volver a sus casas.
Finalmente, luego de años de protestas y luchas, las mujeres lograron obtener buenos puestos de trabajo, viajar al espacio, dirigir naciones, y convertirse en las grandes trabajadoras que pueden llegar a ser en la actualidad.
En el transcurso de este siglo, las mujeres han pasado de ser amas de casa a convertirse en gerentes, construir carreteras, recoger cosechas, transportar agua, ser profesoras, pilotos, fontaneras, cuidar a los más enfermos y representar hasta el 40 por ciento de la fuerza laboral mundial.
Con esto, a lo largo del último siglo y específicamente, en los últimos 20 años, las mujeres se han visto empoderadas y con todas las capacidades para realizar el trabajo que deseen y esforzarse por disminuir la brecha salarial y las desigualdades que puedan existir entre ellas y los hombres.
La actividad laboral de las mujeres se ha convertido en algo esencial para la sociedad y sus familias.
¿Se puede tener un buen desempeño laboral y una buena familia al mismo tiempo?
Se ha determinado que las mujeres pueden tener doble trabajo cuando se trata de mantener sus responsabilidades laborales y a su familia.
Anteriormente, se les obligaba a que desde el matrimonio renunciaran a sus actividades laborales para que pudiesen dedicarse a lo personal completamente.
Sin embargo, con el pasar de los años las mujeres han demostrado que, incluso siendo madres solteras, son perfectamente capaces de mantener todos los ámbitos de su vida en orden.
Además, actualmente la educación está enfocada en enseñarle a los niños que deben prepararse para una sociedad en la cual tanto hombres y mujeres compartan las responsabilidades del hogar. De manera que las desigualdades puedan ser eliminadas.
Hijos más exitosos
Un estudio realizado por Estados Unidos y Reino Unido determinó que los niños criados en hogares con madres trabajadores siguen su ejemplo y tienen una mayor tendencia a una carrera exitosa en un futuro..
Este estudio se basó en las mediciones del Programa Internacional de Encuestas Sociales (ISSP) en las encuestas del Family and Changing Gender Roles.
Así como indicó que los niños, al crecer, están más involucrados con el cuidado de sus hijos.
Con esto, podrás como mujer, salir a tu trabajo sin sentir preocupación alguna de que tu familia está siendo criada de la mejor manera y que tus hijos tendrán un brillante futuro lleno de éxitos.